Hoy voy a barrer de mi vida todo aquello que me hace mal.
AFUERA.
No dejemos en nuestras vidas aquellas personas que en vez de sumar, solo nos traen problemas, intranquilidad y lágrimas. Aquellas personas no son merecedoras de nuestro cariño, debemos apartarlas y darle paso a quien realmente se merece y demuestre cada día que nos hacen bien. Que se preocupen por hacernos sentir únicos y nosotros en retribución demos el cariño correspondiente, la palabra de aliento que también necesite esa persona. Que sea mutuo, ambos se sentirán nutridos de tan amor. Fortalecerá sus almas y los hará sentirse que con ello podrán ganar al mundo entero si se lo proponen así.